Museo Villa Grimaldi Estudiantes: Diego Peña M. La lectura del lugar hoy, es un sinfín de adiciones y sustracciones sucesivas, de particularidades que se transforman en accesorias, sobre los restos relevantes de lo que ha marcado con mayor fuerza a La Villa, su periodo pre-dictadura y de dictadura. El paisaje de la villa se ha convertido en una suma de subjetividades que no llegan a conformar una lectura colectiva, sino una disputa colectiva del espacio. Una intervención en el sitio de Villa Grimaldi debe ser leída como una re-articulación de su sintaxis. Los elementos que deben ser re-articulados son los vestigios del sitio, ya que son lo único auténtico que queda como testimonio invaluable de lo sucedido antes y durante la dictadura, luego de ésta, el espacio fue recuperado y, a falta de una visión unificada ésta se atiborró de intervenciones disonantes entre sí. La valoración de lo auténtico será el punto de vista a utilizar. Es así como se plantea que, para llegar a una traducción fidedigna, son éstos restos los únicos elementos que conforman, como palabras sueltas de un texto ya perdido, un cuerpo digno de ser traído al presente por medio de este traspaso. La forma y contenido material primigenio del lugar conforman un cuerpo singular desde el cual se debe operar. La cercanía de los acontecimientos ocurridos en la villa tiende a generar una visión amplificada de detalles, un flujo continuo y avasallante de información sobre lo ocurrido que atiborra y dificulta el entendimiento. Los espacios se superponen, dialogan y antagonizan unos con otros, es por esto que la villa debe transformarse en un espacio de exhibición de lo acontecido a partir de la conformación de una narración con una nueva sintaxis depurada de elementos que como frases desperdigadas, que sistemáticamente se articulen y comuniquen. Estos elementos, deben quedar al resguardo de una arquitectura contundente, como frágiles restos de un pasado cercano pero aún difuso y diluido. Se propone limpiar completamente la villa de todas las comas, acentos, palabras al viento y demás operaciones, que a modo de adiciones han manchado el lienzo de la Villa Grimaldi, su escrito original para rescatar sus Títulos, y subtítulos, capítulos y temas como verdaderos conformadores de su estructura. La villa, como testimonio escrito en ladrillo, madera y piedra, debe comunicar su historia particular a partir de este nuevo lenguaje de operaciones sintácticas regidas por reglas que conformen una nueva combinatoria de sus partes.